Misionarios asumen doctrina socialcatólica a favor de familias pobres

 

Ignacio GUERRERO

AZUA. – Misioneros dominicanos y de otras nacionalidades radicadas en Estados Unidos, se amparan en la doctrina social de la Iglesia Católica y se desplazan por varios países de la región, en el contexto de un programa de asistencia social y humanitaria a favor de familias pobres que residen en zonas vulnerables.
Representantes del mundo católico recorren varias naciones y reparten alimentos, medicamentos, calzados, ropa, electrodomésticos y reparan “casuchas”, en procura de mejorar las condiciones de vida de personas que subsisten en un ambiente inhumano.

Desde la pasada semana, alrededor de 60 voluntarios y el padre William, están concentrados en Azua y zonas aledañas, situadas en la región Sur de República Dominicana, quienes propician acciones humanistas para liberar de la pobreza a quienes sobreviven en condiciones deprimentes.

Víctor Abreu y Magdalena Tapia, quienes son esposos y dominicanos que enaltecen al país, valoran el plan humanitario porque de ese modo ponen en práctica las enseñanzas y sacrificios de Jesucristo, el hijo de Dios que sacrificó su vida por la redención de la humanidad.

“Nos sentimos muy bien, en la medida estamos ayudando a gente que necesita de nosotros y esto lo hacemos con amor y abnegación, ya que Jesús auxilió a los a todos los seres humanos”, afirmaron.
La doctrina social de la Iglesia Católica, la cual se basa en las orientaciones católicas, en el evangelio y la fe, alimenta los espíritus de quienes se solidarizan con los demás y aman al prójimo como a ellos mismos, conceptos que sujetan las acciones de los misioneros dominicanos y de otras naciones de América Latina y el Caribe.

Además, comprenden, asimilar e interpretan la visión y las luces del cristianismo, porque proyectan procesos por el respeto de los derechos humanos, promueven el bien común, la solidaridad y se esfuerzan por la construcción de una sociedad justa, fraterna y humanista.