Santo Domingo, RD.– El ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Miguel Ceara Hatton, informó que, ante la desestimación de una reforma fiscal, el gobierno seguirá racionalizando el gasto lo más que se pueda para la ejecución de obras prioritarias.
Al respecto, informó que, en el primer año del gobierno del presidente Luis Abinader, alrededor de 130 mil millones de pesos fueron reasignados para lograr un mejor gasto en las partidas presupuestarias.
“Desde que llegamos al gobierno ha sido una línea consistente de mejorar la calidad del gasto, eso no significa gastar menos, sino gastar mejor”, expresó el funcionario.
Refiriéndose al discurso del mandatario dijo que el presidente Luis Abinader escuchó la voz de la población, al descartar la aplicación de una reforma fiscal en estos momentos.
Sin embargo, Ceara Hatton aclaró que el país va a pagar un costo porque con los niveles de recaudaciones actuales no da para hacer las obras que necesita y demandan los ciudadanos en materia de infraestructura, salud, educación entre otras.
Sobre el manejo de la Administración Pública, Miguel Ceara Hatton, narró que “hay un problema estructural en la fiscalidad de República Dominicana que en algún momento se tendrá que resolver”, precisó.
En ese sentido, adelantó que el Gobierno va a fijar para el próximo año cuáles son las prioridades que demanda el país, como, por ejemplo, la seguridad ciudadana, y simultáneamente, proceder a mejorar la calidad del gasto.
El funcionario recordó que República Dominicana se encuentra entre las naciones que tienen la presión tributaria más baja.
El ministro de Economía explicó que, si RD se compara con192 países del mundo, el 70% tiene una presión tributaria superior al 20 %; mientras que, en América Latina, el promedio es de 27 %, y en la República Dominicana es de 14.1%.
“El promedio del gasto en el país es de un 17% del PIB, lo que significa que el 90% de los países del mundo tienen un gasto mayor, o sea que estamos muy por debajo de los estándares internacionales”, sostuvo.
Recordó que la crisis sanitaria que impactó en 2020, le costó al país el 23% del producto interno bruto (PIB), entre los ingresos que no entraron a la economía, debido a la pandemia, más los gastos adicionales, tuvo un costo de 18 mil 460 millones de dólares.
“El otro elemento importante de esta crisis es que es mundial, en el 2020 el 84% de los países del mundo registraron un crecimiento negativo, una cifra que no se veía en siglos”, explicó.
“Estamos hablando de una situación mundial, porque desde marzo de este año la economía dominicana comenzó a repuntar; y la proyección para terminar el año, es un crecimiento mínimo de un 10%”, reveló.
Citó que Estados Unidos tuvo un déficit en el 2020 de un 15% de su PIB, mientras que Alemania registró un 5%.
Hatton anticipó que el Presupuesto Nacional y Ley General de Ingresos y Gastos Públicos del 2022; será modificado para establecer prioridades en cuanto al gasto proyectado en la edificación de obras de interés colectivo.
Manifestó que en el país hay un problema estructural “y hemos ido acumulando un déficit de diferencia entre los ingresos y los gastos; equivalente entre los 3 y 4 puntos porcentuales”.
Precisó que en este momento no hay las condiciones para hacer una reforma fiscal; aunque técnicamente se necesita y va a ser necesaria en algún momento.
“Vamos a terminar un año con mucho crecimiento, recuperando los niveles de empleos y con un bajo déficit fiscal”, adelantó el ministro.