El liberalismo: paradigma económico, social y moral

Por: Miguel Antonio Ortiz Pinales.

El liberalismo es una teoría política y económica que defiende el primado  de la libertad individual. Cabe resaltar que este término surge como doctrina durante los siglos XVII y XVIII.

Entre los principales exponentes de este sistema económico nos encontramos con: el empirista inglés John Locke, 1632-1704, uno de los iniciadores del liberalismo político. Asimismo, con la figura de Charles-Louis de Secondat Montesquieu, 1689-1755, este fue un jurista, filósofo y político francés, considerado como el fundador de la sociología. Por último, tenemos al filósofo moral y economista escocés Adam Smith 1723-1790.

En primer lugar hay que señalar que  el filósofo Lucke, sostiene que existe una ley natural: ley de Dios y de la razón, que gobierna la naturaleza. También,  afirma que  el hombre se encuentra capacitado para comprender sus deberes morales, ya que el cumplimiento de los mismos es razonable. Los deberes/derechos a que obliga la ley natural son: la vida, la libertad y la propiedad. Estos derechos/deberes existen en el estado natural en el que el hombre se encuentra antes de inicial el estado político.

Así mismo, asegura que los elementos básico del estado político son: la libertad y la igualdad; el hombre razonable así comprende. Por lo antes expuesto se puede decir que el hombre como ser racional desea vivir en un estado, donde estos derechos; a la vida y a la libertad se encuentren garantizados a través de la existencia de un sistema jurídico.

Por otro lado, en la filosofía económica de Montesquieu, la ley era “la relación necesaria que se deriva de la naturaleza de las cosas”. Por ello cree que todo ser tiene su ley y, por tanto, también la tiene el hombre. El hombre, como ser físico, está como los demás cuerpos, gobernado por leyes inmutables; como ser inteligente viola incesantemente las leyes que Dios ha establecido y cambia las que él mismo establece.

Este filósofo plasma los tipos  fundamentales de gobierno, la república, la monarquía y el despotismo. Reconoce además que el principio de la república en la virtud, entendida como virtud política, esto es, amor a la patria y a la igualdad. El principio de la monarquía en el honor, esto es, el prejuicio personal o de clase.  El principio del despotismo en el temor.

Por otra parte, en el pensamiento de Smith se pueden destacar las siguientes ideas:

Valor trabajo: el valor de un bien se encuentra determinado por la cantidad de trabajo necesario para producirlo.

Teoría liberal del estado: el estado es un mero árbitro de las transacciones económicas.

Subordina lo político a lo económico: por ello sustentaba que el crecimiento económico aumentaba la moral de las naciones.

En definitiva, el liberalismo como sistema político y económico, no se oponía a la autoridad, sino que se afirma la autonomía que tiene el individuo para seguir leyes racionales. Se puede decir, que el liberalismo como teoría política exigía la separación del poder político y religioso. También, buscaba separar la política de la moral. Asimismo, abogaba por la formación de legislaciones para limitar el poder de los gobernantes.