Autoridades de Economía, Agricultura y Contrataciones Públicas discuten cómo articular políticas para apoyar el desarrollo rural y la agricultura familiar
El Estado dominicano ha realizado compras públicas por más de 23,000 millones de pesos al sector agropecuario para la distribución de alimentos a través de diversas instituciones e iniciativas desde agosto de 2020 hasta junio de este año.
Según el director general de Contrataciones Públicas (DGCP), Carlos Pimentel, esto refleja un avance en la inclusión de pequeños y medianos productores familiares en el registro de proveedores del Estado, lo que genera un impacto positivo en su economía.
Del monto total adjudicado en el período mencionado (que asciende a 509,324 millones), un 4 % se destinó a este sector. Aunque Pimentel reconoció que sigue siendo poco, esto representa un crecimiento del 3 % en sólo un año, cuando antes sólo alcanzaba el 1 %.
El funcionario enfatizó hoy la necesidad de trabajar en una agenda que democratice las compras públicas, con la participación de más agricultores en estos procesos, durante el Encuentro sobre Compras Públicas y su Vinculación con la Agricultura Familiar y el Desarrollo Rural, organizado por los Ministerios de Economía, Agricultura, Hacienda y la DGCP.
“Hay que poner todo esto en una dinámica bajo la articulación y coordinación institucional al más alto nivel, y hacerlo de manera sostenible. Debemos sembrar una política pública que garantice la sostenibilidad”, remarcó.
Medidas
A modo de ejemplo, Pimentel mencionó haber visto pliegos de condiciones para la compra de plátanos “con el mismo nivel de complejidad que la compra de una aeronave”, lo cual dificulta la contratación de este tipo de servicios que requieren procesos más simplificados.
En cuanto a las medidas tomadas en esta dirección, la DGCP está trabajando en el lanzamiento, a finales de año, de un portal que simplificará las compras por debajo del umbral, facilitando las adquisiciones directas de productos y servicios, y añadiendo más transparencia, ya que el catálogo se desplegará “como un Amazon público“.
Dijo que la institución está a la espera, como otras, de la Ley de Agricultura Familiar, que proporcionará un marco de referencia para impulsar el incentivo de este subsector, así como la creación de un Gabinete de Desarrollo Rural que coordine a las más de 20 instituciones involucradas en mejorar las condiciones de vida de las comunidades rurales.
Hasta ahora, 28,235 productores agropecuarios son proveedores del Estado, con acceso a 522 unidades de compra en el portal transaccional.Estas unidades incluyen a 60 hospitales, 170 gobiernos locales, 289 instituciones gubernamentales, así como organismos extrapoder u otras entidades dependientes del Poder Ejecutivo que requieren la compra de alimentos.
Principales obstáculos para el desarrollo rural
La viceministra de Desarrollo Rural del Ministerio de Agricultura, Miriam Guzmán, explicó que las instituciones actualmente tienen que superar algunos obstáculos para trabajar en pro del desarrollo rural.
Entre ellos, citó la necesidad de que se comprenda el concepto de la agricultura familiar, capacitando a los productores para que sean proveedores y conozcan cómo funciona el mercado y la industrialización. Destacó la importancia de involucrar a las mujeres y los jóvenes en este proceso.
Además, se necesita una menor burocracia en el sistema de compras públicas, la adaptación de los procesos a las necesidades de los agricultores, el aumento de la confianza en pagos justos y oportunos para ellos como proveedores, así como el fortalecimiento de la asociatividad a través del cooperativismo.
Acompañada de Pimentel y Guzmán en el panel “Desarrollo rural y agricultura familiar: oportunidades y potencial para las contrataciones públicas”, Ana Carolina Abbott compartió la experiencia del Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (Inabie) en la compra de alimentos a estos productores.
La directora de Formulación y Evaluación Nutricional de esta institución señaló que han comprado más de 120 millones de libras de productos agropecuarios que han sido proveedores para las jornadas educativas de tanda extendida.
Esto ha permitido variar la alimentación de los centros educativos con la inclusión de fruta fresca en la dieta. El Inabie espera expandir esto a todas las escuelas del país, aunque aún están trabajando en garantizar la inocuidad de estos alimentos por parte de los proveedores.
Articulación para gestionar el desarrollo
El viceministro de Planificación e Inversión Pública del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, Luis Madera, enfatizó que todas las instituciones públicas deben generar políticas públicas coordinadas para llevar el desarrollo a las comunidades rurales.
“Debemos dejar de ver al hombre y a la mujer del campo como un insumo más en la cadena de producción alimentaria nacional, y reconocerlos como seres humanos que necesitan desarrollo en su territorio“, reflexionó en crítica a las autoridades de distintas instituciones gubernamentales que manejan iniciativas relacionadas con la agropecuaria.