Por: Karleny Cabrera
A causa de las muchas luchas a lo largo de la vida, al ser humano se le suelen desgastar las fuerzas y el deseo de seguir adelante, puesto que creen que ya ningún esfuerzo que realicen tendrá frutos y esto los dirige, literalmente,hacia el desánimo.
Puede ser que en esos momentos de agonía mental y ansiedad, la persona acuda a mecanismos y métodos puntuales para tratar de sobrepasar con rapidez la frustración presente y salir de ese malestar.
Ahora bien, en primer lugar el individuo debe tener la disposición de avanzar, pero también, organizar su mentepara tener bien definido hacia dónde quiere llegar, cuáles metas cumplir y, qué objetivos alcanzar; pues, ese enfoquele impulsará a salir de su estado actual.
Pero no sólo es estar dispuesto a salir adelante lo que va a influir en el avance de la persona, puesto que hay un factor que es irremplazable y que va a determinar el ascenso que se desea; ese elemento es la fe en Dios.
Creer genuinamente en el Señor marcará un precedente en el cumplimiento de los objetivos planteados y garantizará, sin lugar a dudas, el éxito anhelado cuando se tiene la sensación de que ya no se puede más.
La Biblia expone en el libro de Efesios capítulo seis, versículo diez: “por lo demás, hermanos míos, fortaléceos en el señor, y en el poder de su fuerza”.
Amigo lector, la salida a toda nuestra ansiedad está compuesta de dos factores fundamentales: fe en Dios y disposición de corazón. Así que, cuando sientas que ya no puedes más, busca a Cristo y ordena tu mente; de ahí obtendrás grandes resultados.