Los israelíes se preparan ante represalias tras muerte del líder de Hamás en Teherán

Las familias de los 115 rehenes que siguen retenidos en Gaza están muy preocupadas en la mañana del miércoles Temen que la primera consecuencia de la eliminación de Ismail Haniyeh en Teherán sea la interrupción de todas las negociaciones encaminadas a alcanzar un acuerdo de tregua en la Franja de Gaza. Y, por supuesto, la liberación de al menos uno de sus familiares. Los comentaristas difieren sobre este punto.

Por el momento, Israel no reivindica la autoría de este ataque selectivo en Teherán. Todos los dirigentes políticos se han negado a comentar el tema esta mañana, a excepción de tres ministros de extrema derecha que han publicado en las redes sociales su satisfacción por el ataque en Teherán, informa nuestro corresponsal en Jerusalén, Michel Paul.

Sin embargo, Ismail Haniyeh es un objetivo israelí desde los atentados terroristas cometidos por Hamás, que mataron a casi 1.200 personas en suelo israelí el 7 de octubre, e incluso antes de estas masacres.

El Estado hebreo casi nunca reivindica su autoría cuando lleva a cabo ataques en el extranjero, en particular en territorio iraní. Se produjo pocas horas después de la eliminación en Beirut de Fuad Shukr, jefe del brazo armado de Hezbolá, cuya muerte confirmó Israel. Hezbolá lo niega.

También hay que recordar que hubo otro asesinato reivindicado, pero no confirmado: el de Mohamed Deif, jefe del Estado Mayor de Hamás, el 13 de julio. Israel ha prometido perseguir a todos los responsables del atentado terrorista del 7 de octubre, estén en el enclave palestino o en cualquier otra parte del mundo.

Los medios de comunicación de este país recuerdan que Israel prometió perseguir a todos los responsables del atentado terrorista del 7 de octubre, en particular por boca del primer ministro Benjamin Netanyahu, “tanto si se encuentran en el enclave palestino como en cualquier otra parte del mundo”. Esta postura recuerda a lo que hizo el Estado hebreo tras los Juegos Olímpicos de 1972 y la muerte de 11 atletas israelíes.

Israel se prepara ahora para las represalias de Irán y sus aliados, y también de Líbano tras el ataque selectivo contra los suburbios del sur de Beirut, cuya autoría ha reivindicado. El ejército acaba de anunciar el cierre del espacio aéreo en el norte del país.