Ignacio GUERRERO.
SANTIAGO. – Para el secretario general del PRM, en Santiago, el presidente Luis Abinader Corona es el padre de la democracia dominicana en los tiempos modernos y una muestra de esto se expresa en la nueva Constitución proclamada ayer domingo, en la cual se incluye la no reelección presidencial.
Conforme al doctor José Enrique Romero, quien además es alcalde de Puñal y coordinador del Consejo de Alcaldes de los municipios de la provincia de Santiago, “la modificación a la Carta Magna propiciada por el jefe de Estado constituye un proceso histórico y democrático, porque por primera vez un presidente decide establecer que no optará por otro mandato, a pesar del sólido respaldo que tiene en la población”.
“Abinaner Corona, -precisó el dirigente perremeísta- se consagra como un demócrata a carta cabal, porque en el proyecto de renovación de la Ley Sustantiva propuso un candado para ponerle fin al caudillismo e impedir que alguien se quiera perpetuar en el poder”.
Y añadió “otro aspecto que permite valorar la vocación democrática del mandatario, es que no abuso del poder absulto que posee en el Congreso Nacional optó por impular una reforma constitucional en base al consenso, en la medida propicia el afianzamiento de la democracia, la alternabilidad del poder y promover los principios que aseguren el respeto a los derechos fundamentales de las personas”.
“Una de las modificaciones constitucionales se basa es la ampliación del artículo 268 que consagra la elección presidencial como un derecho inmodificable y esto es un candado, con la finalidad ningún presidente presente ni futuro podrá modificar las normas de elecciones para beneficio propio”, comentó Romero.
“Además, bajo el nuevo esquema el consejo Nacional de la Magistratura asumirá la responsabilidad de escoger del procurador general de la República y rocuradores adjuntos, garantizando así una justicia independiente y libre de presiones o incidencias políticas partidistas.
“Esta Nueva Reforma Constitucional es la visión de un verdadero demócrata, porque actúa con amor patrio y su disposición procura consolidar las instituciones estatales, contribuir con la estabilidad socioeconómica y afianzar la democracia representativa y participativa.