Por Editorial Periódico Camino.
Para vivir el espíritu de la Navidad el papa Francisco nos recomienda combinar alegría, oración, gratitud y petición por nuestros seres queridos, y en este año, esa plegaria al Creador es más necesaria, porque estamos pasando por momentos muy difíciles, a causa de la pandemia del Covid-19.
Cuantas familias hoy lloran la partida de la madre, padre, hijo, hermano y vecinos, en muchos casos, sin poder despedirlos con la solemnidad y el respeto que merecen, por temor al contagio.
Pero, a pesar de esta situación, debemos mantener la esperanza, trabajando y soñando que tendremos un mañana mejor, si todos aportamos respetando las medidas sanitarias, sobre todo, en estos días festivos de fin de año.
En esta Navidad, desde CAMINO abogamos por el crecimiento de la solidaridad, para que ningún dominicano sufra soledad, hambre ni desnudez.
Que nuestra gente del campo no tenga que salir huyendo de sus comunidades en busca de un mejor destino, refugiándose en las grandes ciudades en donde sus calamidades serán mayores, esto como consecuencia del abandono al que han sido sometidos sus moradores durante décadas.Deseamos que desaparezca la violencia intrafamiliar, culpable de tanto dolor, haciendo de muchos hogares un infierno.
Soñamos con una clase política que entienda que su rol en la sociedad es trabajar por el bien común.Anhelamos que un segmento importante de la juventud dominicana que está descarriado, cambie de actitud y no continúen viendo pasar sus días entre los vicios y la degradación moral que marchita para siempre su futuro.
Deseamos que el Niño Jesús que nació en Belén haga morada en el corazón de nuestro pueblo, haciendo de nosotros mejores ciudadanos y ciudadanas. Solo así tendremos un nuevo día. ¡Feliz Navidad!