En ese distrito municipal de Dajabón concluyó ayer lunes el plazo otorgado para que indocumentados salgan de manera voluntaria
La muerte de varios hacendados del distrito municipal Santiago de la Cruz, además de robos atribuidos a haitianos y las pocas plazas de trabajos para los dominicanos serían las motivaciones de movimientos y las autoridades locales para dar un plazo, que culminó este lunes, a los haitianos indocumentados a los fines de que salgan de esa demarcación de Dajabón.
Así lo indicó el titular de la Junta Distrital de esa demarcación, Walfry Labour, quien explicó que tras el aviso en la localidad esperan que no se registren disturbios, puesto que la mayoría de los extranjeros han preferido salir de manera voluntaria.
Consultado sobre los siguientes pasos, culminado el plazo dado para la salida voluntaria de los extranjeros, Labour advirtió: “recogeremos a los haitianos y los sacaremos de nuestro territorio. Si no quieren salir de una manera voluntaria nosotros vamos a instar, el último recurso sería la fuerza”.
El edil de Santiago de la Cruz, un distrito municipal con una población que supera los 2,000 habitantes, detalló que hace unas dos semanas, previo al plazo, el número de indocumentados superaba los 300. “Esa cifra ha disminuido en 70 % (tras el aviso)”, indicó.
“La patria de Duarte está en peligro”
Labour expresó durante una visita a Diario Libre su “preocupación no solo por Santiago de la Cruz, sino por el país. La patria de Duarte está en peligro. En el caso nuestro (el distrito municipal) hemos perdido a tres hacendados importantes”.
El funcionario municipal citó el caso de un ganadero que a principios de octubre “se salvó por milagro de Dios, porque logró escapar por una ventana y escaparse por un cañaveral. Y a diario, en nuestra comunidad, los robos no cesan. Nuestros agricultores siembran y cuando van a cosechar no encuentran nada”.
El edil señaló que las autoridades de la Dirección General de Migración y el Ministerio de Interior y Policía han solicitado que la calma se mantenga, a raíz del llamado a los indocumentados.
La mayor resistencia
Referente al ambiente en la localidad tras la medida, el edil señaló que la mayor resistencia ha venido de los ganaderos dominicanos, debido a la reducción de mano de obra haitiana.
“Los ganaderos tendrán que buscar la mano de obra (local) y ahora si habrá oportunidades para los dominicanos. Vamos a ver si es verdad que el dominicano no quiere trabajar. Después, si hace falta mano de obra, si podemos traer a los haitianos, pero ya de una manera regular”, señaló.
Casos a tomar en cuenta
El edil indicó que “por un asunto de humanidad” han identificado casos que deberán tomarse en cuenta. Uno de ellos involucra a aquellos haitianos indocumentados que compraron terrenos a dominicanos de la zona. “Ellos han construido viviendas allá. Hay identificados cinco casos, se les dará un mes para que vendan esas propiedades a dominicanos”, explicó.
“Si en un plazo de un mes no han vendido tendremos que tomar decisiones”, advirtió.
Otro caso involucra a haitianas que han dado a luz a niños hijos de dominicanos. “Cuando saquemos a todos los ilegales vamos a trabajar esos casos para que los dominicanos puedan regularizar la condición migratoria de su cónyuge”, sostuvo.
El gobierno dominicano anunció a principios de octubre la deportación de unos 10,000 haitianos con un estatus migratorio irregular, una medida rechaza por las autoridades de ese país, que han pedido el cese de las repatriaciones.
La semana pasada, el ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, dijo que es insensato el llamado que hacen las autoridades haitianas de parar las deportaciones.
“El gobierno dominicano no puede aceptar el insensato llamado a detener las repatriaciones, pues este sería el equivalente a declarar una frontera abierta, incentivando una mayor migración irregular al país, esto jamás lo permitiremos”, sentenció.