
Varios países asiáticos como la India, Tailandia o Filipinas sufren el impacto de las altas temperaturas y afrontan unos meses difíciles para la agricultura debido al fenómeno de El Niño, aunque la ola de calor empieza a remitir.
Pese a que hoy llovió en Bangkok y otras partes de Tailandia, las temperaturas han superado los 42 grados centígrados en algunas zonas del centro y norte del país, que en abril vive su mes más seco y caluroso antes de la llegada del monzón, según el Servicio de Meterología tailandés.
Las autoridades tailandesas han publicado en las redes sociales consejos para que las personas, principalmente menores y ancianos, tomen precauciones ante el riesgo de golpes de calor.
En Birmania (Myanmar), las temperaturas alcanzaron hoy unos máximos de 42 grados en un país con un sistema eléctrico deficiente y donde muchos hogares y edificios no tienen climatización adecuada.
Tailandia llegó el pasado 15 de abril a los 45.4 grados en la provincia de Tak, con lo que superó por primera vez en su historia los 45 grados, y Laos también registró la semana pasada una temperatura récord de 42.7 grados en Luang Prabang.
Además, los meteorólogos avisan de que este año el fenómeno de El Niño traerá unos meses más áridos en la época del monzón en gran parte de Asia, lo que, sumado a los efectos de la crisis climática, puede provocar pérdidas graves en la agricultura.
En China, la provincia meridional de Yunnan emitió este lunes una alerta naranja por una sequía causada por el menor volumen de precipitaciones en alrededor de diez años, que podría provocar un racionamiento de la energía en el sector local de producción de aluminio.
Países como Tailandia, Birmania, Laos y Malasia también están sufriendo un alto índice de contaminación del aire debido en gran parte a los incendios provocados en la agricultura para limpiar los campos, lo que ha elevado la polución a niveles insalubres.


