“Lo más importante de la vida: hoy, ahora, ustedes, el presente”, dijo en un momento del show para luego interpretar el conocido tema “Aquí”.
Acompañado de cuatro músicos (guitarra, bajo teclados y batería) volvió a mostrar lo bueno que es escuchar la música en directo.
El artista, nacido en Santiago de Chile hace 49 años, dio un repaso por los temas que lo hicieron popular en el país a mediados del la década 90 cuando lideraba a la banda La Ley, así como también canciones de sus dos álbumes solo.
Cuevas encontró una interacción importante en la audiencia, que devolvía con coros, gritos y aplausos la energía que el cantante y su banda les mandaba. “Cuando el público es asi todo es bueno”, expresó. El show estuvo poblado de temas conocidos como “Mentira”, “Fuera de mí” (para el que pidió que encendieran las luces de los celulares), “Más allá” (que le dedicó a una fanática que se suicidó), entre otras de la etapa de La Ley, que mezcló con algunas más recientes como “Mírame a los ojos”, un single que formará parte de su próximo álbum en solitario.
“Esto es día de bonche, ¿verdad?”, dijo, encontrando enseguida la aprobación de los presentes, al escuchar al chileno expresar una palabra coloquial de los dominicanos. Siguió diciendo que el pasado martes estuvo de “bonche” y aprovechó para agradecer las muestras de cariño que recibió en todos los lugares a los que fue. “Eso es maravilloso, muchísimas gracias por eso”, dijo y continuó su concierto.
Gracias a la variedad temática que tiene el repertorio de canciones de Cuevas, hubo espacio también para la reflexión, cuando presentó la canción “El borde”, que pertenece al último álbum que realizó La Ley el año pasado llamado “Adaptación”. “Estamos todos los días anhelando vivir en un mundo pacífico, en un mundo donde todos nos podamos entender de la mejor forma posible. Creemos que esos cambios vienen a través de un líder, de un movimiento, pero el verdadero cambio que uno tanto anhela, empieza dentro de uno”, externó.
Luego de más de una hora y media sobre el escenario, se despidió para regresar enseguida gracias a la insistencia de los presentes que pedía otra. Interpretó “Día cero” y luego “Tejedores de ilusión”, con la que terminó un enérgico concierto.
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