Un grupo de científicos japoneses y rusos de la Universidad de Kindal, en Japón, ha logrado revivir células de una cría de mamut conocida como, Yuka, que vivió en el mundo hace 28 mil años, lo que se ha considerado como un hito de la ciencia debido a la posibilidad de poder clonar animales extintos.
En la investigación a cargo de la universidad, ubicada en la ciudad de Osaka, se logró trasplantar núcleos celulares de la médula ósea y el tejido muscular del mamut Yuka, en ovocitos de ratas que fueron utilizadas durante el desarrollo del experimento.
El estudio se ha podido llevar a cabo gracias a las excelentes condiciones del tejido congelado, que se preservó en perfectas condiciones en el permafrost siberiano, cerca de las costas del océano Ártico donde fue encontrado.
La actividad biológica de las células se pudo constatar en 21 de 24 núcleos celulares en los que se trabajó la investigación científica.
Según las propias palabras del científico, Kei Miyamoto, de la Universidad de Kindal, cinco de los núcleos presentaron reacciones biológicas tal cual ocurre justo antes de que comience la división celular.
“Esto sugiere que, a pesar de los millones de años transcurridos, la actividad celular aún puede sobrevenir y partes de ella pueden recrearse”, sostuvo Miyamoto para la revista Nature.
No obstante, en ninguno de los núcleos se pudo observar la división celular que se necesita para que se produzca el nacimiento o en este caso renacimiento de una especie extinta, debido al daño que existe en el ADN.
Miyamoto afirma que esto no será un impedimento para continuar con el experimento, ya que aboga por la creación de nuevas tecnologías hasta que se logre tener un pequeño mamut caminando en algún zoológico.