Por :Henry Arias Abad
Santiago, RD. – El doctor Miguel Ortega, director del Hospital Regional Presidente Estrella Ureña, reveló importantes avances y desafíos que enfrenta esta institución sanitaria clave para el Cibao. Durante una entrevista, el funcionario subrayó que el hospital ha dejado de ser únicamente un centro materno, para convertirse en un eje central de atención especializada en la región.
“Hemos triplicado la cantidad de consultas mensuales, que eran 11,000, gracias al aumento de la cobertura y a la mejora en los servicios”, señaló Ortega, destacando que el hospital ofrece atención integral en psiquiatría, neurocirugía, cardiología, oncología y otras áreas médicas.
El Estrella Ureña cuenta con 86 camas en su hospital general y más de 220 en total, además de quirófanos modernos con pisos antibacterianos, tras una importante remodelación respaldada por la Fundación Popular. “Si este hospital cierra, Santiago colapsaría en servicios de salud”, advirtió.
Tras el traslado de la maternidad desde el Hospital Cabral y Báez, esta instalación se convirtió en la única maternidad funcional para 14 provincias. Ortega comparó su institución con el Cabral Báez y afirmó que el Estrella Ureña se ha convertido en su “válvula de escape”.
El director enfatizó que aún persiste una percepción errónea en la población: “Muchos creen que este hospital solo atiende partos, pero aquí se trata desde salud mental hasta cuidados paliativos”.
En términos operativos, Ortega reconoció retos importantes, como la contratación de médicos por jornadas de cuatro horas, que no se corresponden con la demanda real. “Eso genera presión sobre el personal médico y compromete la continuidad del servicio”, explicó.
Respecto a la reducción de parturientas haitianas tras las nuevas medidas migratorias, Ortega indicó que la proporción cambió de un 60/40 a favor de las haitianas, a una distribución actual 80/20 en favor de pacientes dominicanas. Esto ha tenido efectos positivos en la recaudación —con un aumento del 35 % en el último mes—, así como en la calidad y eficiencia del servicio.
“Antes recibíamos pacientes haitianas sin historial clínico, sin vacunas ni chequeos prenatales, y con barreras idiomáticas. Todo eso afectaba directamente las tasas de mortalidad materna y neonatal”, explicó.
Tráfico irregular de pacientes desde Haití
El doctor Miguel Ortega reveló una práctica que calificó como irregular y preocupante: el traslado directo de pacientes haitianos en ambulancias desde Juana Méndez hacia el Hospital Estrella Ureña, sin coordinación oficial ni control sanitario. “Nos llegaban ambulancias directamente desde el país vecino, tanto al hospital general como a la maternidad. No puede ser que vengan sin ningún tipo de regulación. ¿Por qué tenemos que asumir esa carga sin mecanismos de control?”, cuestionó el director. Ortega dejó entrever que en algún momento pudo haber existido un acuerdo informal, pero enfatizó la necesidad de establecer protocolos claros para el ingreso de pacientes extranjeros.
El doctor Ortega concluyó su intervención haciendo un llamado urgente a una mayor inversión en salud pública: “Santiago no puede cargar solo con esta responsabilidad. Este hospital necesita recursos, personal y políticas claras para seguir cumpliendo su misión”.