Por ROMMEL SANTOS DIAZ.
Los pilares en que se fundamenta la Alianza para el Desarrollo en Democracia indican la proyección regional que podría tener esta iniciativa de los presidentes de República Dominicana, Costa Rica y Panamá en el contexto actual de la región Latinoamericana y Caribeña sobretotodo al contar con el apoyo decidido de los Estados Unidos de América.
Países como Ecuador y Canadá también han tenido acercamientos importantes con los gestores de la Alianza para el Desarrollo en Democracia y han expresado interés de contribuir con su integración al desarrollo y fortalecimiento de esta alianza regional haciendo contribuciones significativas en diversos aspectos.
El liderazgo de los tres presidentes iniciadores de la Alianza para el Desarrollo en Democracia como actor regional se está fortaleciendo en sus respectivos países y de manera especial en el ámbito regional toda vez que mantienen posturas firmes en el impulso de los pilares que le dieron origen a este espacio democrático que procura elevar el perfil de la región de Latinoamérica y el Caribe.
La participación de los Estados Unidos ayudaría a la consolidación de una asociación estratégica con los países que conforman la Alianza para el Desarrollo en Democracia, lo cual contribuirá a potenciar aéreas de interés común en materia de fortalecimiento de las instituciones democráticas, la libertad de expresión, la promoción del crecimiento económico inclusivo y de nuevas oportunidades laborales; el apoyo a iniciativas para la conservación del medio ambiente y la sostenibilidad, así como la atención del tema de la migración y sus causas estructurales.
La Alianza para el Desarrollo en Democracia tiene todo el potencial para lograr una incidencia regional con los actores claves en un marco de diálogo democrático para buscar mecanismos innovadores y recursos frescos que respalden los esfuerzos de financiamiento para el desarrollo de los países que conforman la alianza e impulsar la creación de empleos y el crecimiento con igualdad y sostenibilidad.
Las aéreas temáticas identificadas por la Alianza para el Desarrollo en Democracia para articular esfuerzos y compartir buenas prácticas y experiencias exitosas son de primer orden para los países de la región como lo son: el cambio climático, la seguridad alimentaria, la educación y la gestión del talento humano, y la ciencia, tecnología e innovación. También el compromiso de desarrollar iniciativas de cooperación Sur-Sur, triangular y descentralizada, así como incorporar socios para la implementación de programas y proyectos que favorezcan a sus países o a terceros beneficiarios.
En el ámbito del comercio y la inversión la Alianza para el Desarrollo en Democracia propugna por la implementación de políticas públicas para promover los objetivos compatibles de una inversión que fomente una alianza estratégica para incrementar los flujos comerciales en correspondencia con el Memorándum de Entendimiento suscrito por los Ministros de Comercio Exterior de la República de Costa Rica, la República Dominicana y la República de Panamá, en diciembre de 2021.
La Alianza para el Desarrollo en Democracia reconoce a los Estados Unidos de América como aliado estratégico para compartir objetivos comunes de fortalecer, en democracia y libertad, la competitividad, el desarrollo socioeconómico y la creación de empleo en todos los países de la región de Latinoamérica y el Caribe, a través del comercio y la inversión.
La búsqueda de actores claves para el optimo funcionamiento y aprovechamiento de una gran alianza estratégica para impulsar la Alianza para el Desarrollo en Democracia, especialmente con el Consejo Empresarial de esta alianza y Estados Unidos, y agrego, a las Organizaciones de la Sociedad Civil y Actores Sociales de los países de la región, el éxito está asegurado.
La comunicación permanente con los organismos financieros internacionales es otro elemento clave para el impulso regional de la Alianza para el Desarrollo en Democracia para establecer líneas de créditos de emergencia y mecanismos de garantía de la deuda para solventar el financiamiento de los distintos países en momentos de crisis. Por otra parte trabajar para fortalecer el financiamiento de los gobiernos locales e instituciones públicas no pertenecientes a los Gobiernos Centrales, sin garantía soberana.
Finalmente, la República Dominicana ha sido escenario importante para la construcción de la Alianza para el Desarrollo en Democracia, lo cual debe mover el interés de los Partidos políticos, las Organizaciones de la sociedad civil y Actores Sociales para integrarse a los esfuerzos de impulsar esta alianza vital para el progreso y el desarrollo de nuestra región en Post Covid 19.