La Santa Cruz y el día de los trabajadores del ramo de la construcción

Por: Araceli Aguilar Salgado 

“Los albañiles son el motor de las edificaciones, se encargan de concretar las ideas que ingenieros civiles y arquitectos plasmamos en papel, cumplen una tarea importante en las obras y proyectos”  

El 3 de mayo es un día muy importante para los trabajadores del sector de la construcción, quienes son parte trascendental en el desarrollo del país, y es que su trabajo es fundamental en la creación de las grandes edificaciones y proyectos de infraestructura.

El sector de la construcción es uno de los más importantes en el desarrollo de un país, ya que proporciona elementos de bienestar básicos a una sociedad al edificar escuelas y hospitales, entre otras infraestructuras; en ese sentido, sus integrantes son parte primordial.

De inicio la palabra albañil es de origen árabe, proviene de la voz banni que significa “el que edifica”. Albanni es “el que construye”.

La albañilería es la habilidad de construir edificaciones y demás obras, empleando, según sea el caso, piedras, ladrillos, cal, yeso, mortero y demás materiales. Pueden trabajar de modo independiente o bajo las órdenes de expertos,

Se trata de un oficio que requiere de experiencia y aprendizaje relacionados con los procesos constructivos, conocimientos que la mayoría de los albañiles adquieren de manera empírica. Ingenieros y arquitectos “nos encargamos de supervisar las obras y, regularmente, estos obreros saben cómo realizar los procesos.

Muchos de ellos saben leer planos, algo que han aprendido con el paso del tiempo, además de su conocimiento en materiales y de la calidad de estos; no necesitamos capacitarlos, ellos ya traen ciertos aprendizajes que les permite incorporarse a los proyectos

Resalta que esta fuerza de trabajo se encarga de levantar muros, cimientos, arcos, drenajes, etcétera, así como procesar los acabados, interiores y exteriores, en general, en edificaciones de una o varias plantas; son los grandes artesanos que dan vida a los proyectos.

Su trabajo es anónimo, desempeñan una labor ruda durante largas jornadas que, en algunas ocasiones, es mal remunerada y sin medidas de seguridad. Por lo general, su ocupación es eventual y es poco común que inicien la cimentación y continúen hasta los acabados o la colocación del último detalle, debido a la especialización que cada uno pudiera tener.

En esta fecha se suspenden las labores. Por la mañana participan en una misa en donde son bendecidas las cruces de madera que están adornadas con flores; posteriormente se lleva a cabo una comida en su lugar de trabajo. Es la fiesta más importante para ellos.

Por otra parte, la mayoría, carecen de seguridad social y prestaciones económicas; las constructoras tienen la obligación de proporcionarle seguro de vida y de servicios médicos, porque están propensos a sufrir accidentes que podrían ser delicados; solo cierto porcentaje está contratado con esas prestaciones.

Aquellos que laboran por su cuenta en obras de menor tamaño también enfrentan esta situación. Las autoridades no han regulado de manera exacta a las compañías para que les ofrezcan esos beneficios. Es como si los contrataran por debajo del agua, son muchas las irregularidades

Actualmente existe escasez de trabajo en el sector formal de la construcción, debido a la disminución de proyectos, lo que implica menos fuentes de empleo. En este contexto, sugiere un organismo regulador que los beneficie y los considere como parte fundamental de un proceso constructivo.

De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, hasta febrero de 2022 había 461 mil 614 obreros ocupados en el ramo de la construcción, quienes laboraron en conjunto, durante los dos primeros meses de este año, 93 mil 263 horas.

Los salarios promedio para los varones fueron de poco más de seis mil pesos mensuales; para ellas, de mil trescientos en ese mismo lapso, por jornadas laborales de aproximadamente 44 horas a la semana.

Las mejores remuneraciones promedio se registraron en Baja California Sur (12 mil 900 pesos); Nayarit (10 mil 200 pesos); y Sinaloa (más de nueve mil pesos). Mientras que la fuerza laboral fue mayor en el Estado de México, con 185 mil personas; Jalisco, 136 mil; y Veracruz, 112 mil.

La Santa Cruz y el día del albañil ambas festividades están profundamente arraigadas en la cultura del país y otros lugares de Latinoamérica Chile, Ecuador, El Salvador, Guatemala, México, Paraguay, Perú, Trinidad y Tobago, Argentina, Colombia, Venezuela y también en España. Sin embargo, son pocos los que conocen la razón de estos festejos

Se trata de una fecha especial para los trabajadores de la construcción, este día se celebra en el país a la Santa Cruz. El festejo consiste en colocar una cruz de madera adornada con flores y papel de china en un lugar visible de la construcción. La cruz debe estar previamente bendecida en una iglesia católica, acción con la que también agradecen por un año más de trabajo.

La fiesta se corona con comida y bebidas para brindar, patrocinadas por el dueño o jefe de la construcción, el ingeniero civil o superintendente responsable del proyecto. En ocasiones al convivio también acuden los familiares de los trabajadores.

El Origen de la Santa Cruz

Existen distintas versiones sobre el origen de esta fiesta, uno de las más recurridos se refiere a los prehispánicos. En principio esta fiesta conmemora a la cruz en la que Cristo murió y resucitó, según la religión católica, sin embargo, para los indígenas la cruz estaba relacionada con los puntos cardinales, que gráficamente forman una cruz.

Mediante este símbolo se realizaban rituales de petición de lluvias y obtención de buenas cosechas a inicios del ciclo agrícola, es decir, en los primeros días de mayo. Al llegar los españoles y notar el fervor por esta creencia, decidieron modificarla para que adquiriera el carácter religioso que tiene hasta nuestros días.

Desde entonces se estableció la celebración de esta fiesta en trabajos de casas, iglesias, conventos, y otros proyectos de construcción con mano de obra indígena.

Otros orígenes de la fiesta se remontan a los primeros años después de Cristo.

Exactamente durante la época en que Constancio Cloro era emperador de Roma.

Se dice que su hijo acudió a un combate contra los bárbaros de Majencio, que querían apoderarse del reino, y salió victorioso gracias a la recomendación que Cristo le dio en sueños, de usar una cruz como estandarte.

Otra tiene que ver con la emperatriz Elena, esposa de Constancio Cloro, quien estaba obsesionada en encontrar la cruz de Cristo. Pidió a su esposo la autorización para demoler el templo dedicado a uno de los dioses romanos, construido sobre el monte Calvario, pues estaba segura de encontrar la reliquia bajo el gran templo.

Para este trabajo requirió de cientos de trabajadores que finalmente le ayudaron a encontrarla. Otros consideran que se celebra porque Jesús fue un ejemplo de construcción y debido a que los albañiles se dedican a esto han arraigado esta celebración.

De cualquier manera, durante este festejo los albañiles alrededor de todo el país ponen cruces en las construcciones para que no sufran accidentes o caídas durante su trabajo

E incluso se ha llegado a pensar que este día tiene sus orígenes con los pueblos prehispánicos, los cuales solían hacer ceremonias y sacrificios para tener buenas cosechas por lo que la fecha coincide con las plegarias que hacían los labradores, agricultores y trabajadores del campo para la fertilidad, las cosechas y la comunidad.

Con el paso de los años, estas actividades se redujeron y los hombres empezaron a dedicarse a otras labores como la construcción y la albañilería.

De esta manera, los trabajadores de la construcción aprovechan este día para celebrar de diversas formas y pedir a la Santa Cruz que los proteja ante los peligros a los que se exponen diariamente.

Esta fecha es también una oportunidad para reconocer la labor de los millones de hombres y mujeres que trabajan en la industria de la construcción de México; quienes han sufrido los estragos de la pandemia por Covid-19, con el cierre de las actividades no esenciales.

Muchos de ellos enfrentaron crisis económicas y tuvieron que buscar otras fuentes de ingresos; mientras que otros continuaron en la industria y hoy en día trabajan por la recuperación del país.

“Cuando caminamos con la Cruz, cuando construimos con la Cruz y cuando confesamos a un Cristo con la Cruz… somos discípulos del Señor: somos bendecidos, la cruz sólo se entiende desde el amor a Cristo” 

Araceli Aguilar Salgado Periodista, Abogada, Ingeniera, Escritora, Presidenta del Congreso Hispanoamericano de Prensa, Analista y comentarista mexicana, del Estado de Guerrero, México. E-mail [email protected]