Editorial periódico Camino.
Ser madre hoy es un reto, porque estamos en una sociedad donde encontramos personas que han enterrado los valores, y esta realidad hace que su misión conlleve más esfuerzo, y sacrificios para tener la familia que soñaron.
Nuestras madres son raíz y soporte del hogar. Ellas vencen todas las limitaciones que se les presentan. Son valientes, y heroínas de la vida. Por eso entonamos con el alma los versos de este hermoso himno compuesto por doña Trini de Moya: Venid los moradores del campo y la ciudad entonemos un himno de intenso amor filial cantemos de las madres su ternura y su afán, y su noble atributo de abnegación sin par…….
En este último domingo de mayo, y siempre, deseamos para ellas mejores condiciones de vida, sobre todo a nivel de salud, porque sus días se marchitan cuando ven a uno de sus hijos enfermos y tienen que enfrentar los altos costos de los medicamentos sin poderlos comprar. Esta situación las lleva a envejecer a destiempo y consumirse como un cirio encendido .
Trabajemos por una sociedad dominicana en donde desaparezcan las injusticias sociales que llevan a tantas madres a vivir en condiciones deplorables. Trabajemos también para que desaparezca la violencia intrafamiliar que está llevado a la tumba a decenas de mujeres, dejando a sus hijos desprotegidos y en la orfandad.
Celebremos este Día de las Madres con el firme propósito de ser artífices de una cultura de paz, terreno fértil, en donde florecerá el respeto, diálogo y comprensión, factores claves para tener comunidades sanas con madres felices.
Que el amor, entrega, servicio y generosidad que encarnan las madres sean parte esencial de nuestra existencia. Nunca las abandonemos. Son nuestra razón de ser, porque quién como una madre, con su dulce encanto nos disipa el miedo, nos calma el dolor….
¡Felicidades Mamá!
