Mensaje de la Academia Dominicana de la Historia con motivo del 180 aniversario de la Independencia Nacional.

Hace 180 años que fue anunciada la separación de Haití, que desde el año 1822 gobernó la parte del Este de la isla de Santo Domingo. En la memorable noche del 27 de febrero de 1844 fue declarada la independencia nacional del pueblo dominicano y creado el Estado nación con el nombre de República Dominicana.

Los motivos que inspiraron el movimiento redentor, liderado por Juan Pablo Duarte y sus compañeros trinitarios, fueron expuestos a la opinión pública nacional e internacional en el Manifiesto del 16 de Enero, considerado el Acta de la Independencia.

Su objetivo principal fue la creación de un Estado libre, soberano e independiente, fundamentado en el respeto a la dignidad humana y en la indisoluble cohesión nacional alrededor de un territorio, de una historia compartida y de comunes valores políticos, jurídicos, sociales, culturales, linguísticos y espirituales.

A partir de entonces el pueblo dominicano tuvo sus propios símbolos patrios, la Constitución, la bandera, el escudo y el himno nacional que constituyen rasgos esenciales de la identidad nacional. Y ha sido ese invaluable legado histórico por el cual nuestros hombres y mujeres han sacrificado hasta sus vidas cada vez que el destino de nuestra nación se ha visto amenazado ante la apetencia de fuerzas foráneas que han querido sojuzgarnos y reducirnos a la condición de satélite colonial.

La Academia Dominicana de la Historia, en el 180 aniversario de la Independencia Nacional, hace votos por la grandeza y el patriotismo del pueblo dominicano, por su aptitud democrática y por su vocación a continuar y reforzar las enseñanzas de los Padres Fundadores, sólidos cimientos que sostienen y defienden tanto la dominicanidad, su soberanía, como los valores que nos identifican como nación.

Exhortamos a todos los dominicanos a poner en alto, hoy más que nunca, nuestro más acendrado fervor patriótico y nacionalista, valores inapreciables que siempre deben estar por encima de los intereses particulares y grupales. ¡Loor eterno a los Padres Fundadores de la identidad nacional y de la República Dominicana!