El mercado fronterizo dominico haitiano se normalizó el pasado viernes y ayer, tras el cese de las protestas de comerciantes y empresarios de Pedernales, para impedir que una señora desde Jimaní instalara contenedores para almacenar su mercancía en unos terrenos que adquirió.
Comerciantes, empresarios y el abogado Juan Francisco Pérez se reunieron la semana pasada en el despacho de la gobernadora Edirda de Oleo, y confirmaron sobre una resolución emitida por el ayuntamiento que dirige el alcalde Alfredo Frances, cerrándole a la señora Aurin Dotel, su negocio de mercancías hacia Haití por este lado.
La señora Dotel, según había informado, que había pagado cuatro cubículos en la estructura del mercado fronterizo para colocar su mercancía manufacturada de forma legal, además de señalar que había cumplido con la ley municipal y la Constitución, por lo que no vio con buenos ojos la medida asumida por el cabildo
Según se ha sabido, los comerciantes de Pedernales temen que la competencia los afecte en el comercio bilateral y que otras personas lleguen al mercado fronterizo de otras partes sin pagar impuestos y abaraten los precios de los productos manufacturados que ellos adquieren y venden.
Ayer los contenedores de la señora Dotel permanecían cerrados, obedeciendo la medida municipal, mientras el negocio binacional se desarrolló normal entre esta parte y Haití.
Durante la mañana, miembros de la Policía fueron observados en los alrededores de los contenedores cerrados de Aurin Dotel, solo con la vigilancia de una persona como forma de protección contra la delincuencia.