Editorial Periódico Camino
El próximo 10 de octubre celebramos el Día Mundial de la Salud Mental, y la fecha es propicia para que pensemos cómo están viviendo tantos dominicanos que sufren trastornos mentales.
Sabemos que el COVID-19 dejó a muchas personas afectadas por esta enfermedad, y a otras las empeoró, sobre todo aquellas que por su estado de pobreza no podían, ni pueden adquirir los medicamentos que necesitan para llevar una vida mejor.
En los campos y calles de nuestras ciudades vemos un cuadro deprimente de hombres y mujeres harapientos, caminando sin rumbo y deambulando noche y día sin esperanza. Caminan mostrando un estado de abandono que demuestra la falta de políticas sociales del Estado, hacia estos seres humanos que están olvidados. El trato y cuidado hacia ellos tiene que ser mejor.
Nos unimos a la petición de Sor Trinidad Ayala Adames, coordinadora de la Pastoral de la Salud de la Arquidiócesis de Santo Domingo, para exigir a la Seguridad Social que incluya y cubra esta patología, como se hace con otras enfermedades.
También saludamos la Caminata 1k, Un Paso por la Salud Mental, que tendrá lugar este domingo en la Capital, exigiendo soluciones al Estado para los que sufren trastornos mentales.Además, este recorrido por las calles busca sensibilizar a la población para que no abandonemos a los que tienen padecimientos mentales. Llegó la hora de tener una actitud de amor y solidaridad con ellos.
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