AP
Londres
Theresa May anunció ayer viernes que renunciará como líder del Partido Conservador de Gran Bretaña en dos semanas más, admitiendo que fracasó su intento por sacar a Gran Bretaña de la Unión Europea e iniciando la contienda para reemplazarla como primera ministra.
May fungirá como primera ministra en funciones hasta que se nombre a un sucesor, un proceso que podría demorarse varias semanas. El nuevo líder conservador asumirá el cargo de primer ministro sin necesidad de convocar nuevas elecciones y heredará la tarea de intentar completar el Brexit.
Con la voz rota, May dijo en un discurso televisado desde el exterior de su residencia oficial, en el 10 de Downing Street, que pronto dejaría un cargo que ha sido “el honor de mi vida”.
May se convirtió en primera ministra un mes después de que los británicos decidieran abandonar la Unión Europea en un referéndum celebrado en junio de 2016, y su mandato se ha consumido tratando de lograr ese objetivo.
Presión
La dirigente cedió a la implacable presión de su partido para dimitir al no poder completar el Brexit en el plazo establecido, que finalizó el 29 de marzo. Está previsto que Gran Bretaña salga de la UE el próximo 31 de octubre, pero el Parlamento no ha aprobado aún los términos del divorcio entre Londres y Bruselas.
Su marcha abrirá una pugna por el liderazgo de la formación, a la que podrá presentarse cualquier legislador conservador. Por el momento, el favorito es Boris Johnson.