El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, dijo ayer jueves en su intervención ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en Nueva York que tanto él como miembros de su gabinete ministerial han recibido amenazas de muerte en los últimos meses, en medio de un incremento sin precedentes de la violencia en la nación andina.
Noboa, quien asumió el 23 de noviembre para un periodo de 18 meses, habló ante el foro internacional sobre la situación de Ecuador, del que según dijo pasó a ser “considerado un país de paz” a uno que ahora se ve amenazado por una ola de delincuencia organizada transnacional.
Refirió que “casi todos los días, por los últimos 60 días, hemos tenido amenazas de muerte, asimismo nuestros ministros y sus familias”, aseguró sin dar mayores detalles.
Al presidir la sesión del Consejo de Seguridad, el mandatario de 36 años dijo que su gobierno tiene una deuda pendiente, “ya que dentro de las mismas elecciones (en las que alcanzó la presidencia en segunda vuelta) tuvimos a un candidato presidencial que fue asesinado”. Se refirió a Fernando Villavicencio, quien abanderó la lucha contra la corrupción durante su campaña.
“El crimen transacional demanda una contundente y oportuna respuesta”, dijo Noboa, y abogó por “el apoyo de la cooperación internacional” en favor de la paz.
ESCALADA DE VIOLENCIA
En los últimos tres años, Ecuador ha vivido una escalada de violencia e inseguridad inédita que las autoridades han atribuido a la presencia de grupos de delincuencia organizada vinculados al narcotráfico, que han desafiado al Estado a través de una ola de actos delincuenciales y criminales, tanto en las cárceles del país como en sus calles.
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