Por Editorial Camino
Las tensiones que ha vivido el país en los últimos días a consecuencia de las diferencias entre miembros del partido en el poder deben terminar.
La sociedad dominicana pasa por momentos muy difíciles, en cuanto a la violencia, manifestada en diversas formas, como la intrafamiliar, delincuencia común, y la inseguridad, y lo menos que necesita nuestro pueblo es que la clase política, con su mal comportamiento, agregue otro elemento peligroso de intranquilidad que podría fanatizar a sus seguidores y llevarnos a situaciones no deseadas.
Hablando la gente se entiende. Así lo hemos escuchado siempre, y es verdad.
Evitemos que los intereses personales y grupales perturben la paz que anhelamos.
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