
Por: José Herrera
Entendemos que en el momento actual la humanidad está atravesando momentos difíciles debido a la pandemia del coronavirus.
La República Dominicana como parte de este planeta no escapa a esta situación.
Entendemos que la política económica que se debe tomar debe de ser expansiva, pero hay que entender que todo tiene sus límites.
Lactuales autoridades (PRM) se han pasado de la raya con los abultados préstamos internacionales que han realizado. Sólo en los últimos meses se han tomado 8,153.8 millones de dólares norteamericanos, esto es, en bonos soberanos solamente. Pero a pesar de estos préstamos obtenidos la población dominicana no ha tenido mejoría alguna.
En este momento la deuda pública consolidada pasa de los 60,000 millones de dólares, es decir, un 75% del producto interno bruto, aumento sin precedente en la historia de la República Dominicana(18.7% en nueve meses). Pensamos que el retroceso en lo referente al crecimiento económico fue demasiado exagerado, llegando a 7.7% del pib (-7.7%). Además algo sumamente peligroso fue el déficit primario (no recaudar la totalidad de intereses de la deuda), esto fue de -4.5%. El mayor déficit primario en décadas. Algo importante que debemos ponerle atención de una forma urgente es al proceso inflacionario que nos está afectando (10% en los últimos 9 meses). Esta situación se debe a dos razones fundamentales, una es el excesivo aumento del dinero en circulación (34.02%) llevando el a 551,533 pesos dominicanos. La otra razón es el extraordinario aumento de la demanda de bienes y servicios, con una gran participación de los vecinos de Haití.
Hay que tener presente que si la demanda aumenta y la oferta se queda igual o aumenta en una proporción menor a la demanda los precios suben. En relación al monto de los certificados (déficit cuasi fiscal), que se creó en el gobierno del PRM-PRD la situación sigue empeorando, ya que en el momento actual sigue aumentando, pasando de 12,000 millones de dólares, siendo una tragedia para el pueblo dominicano, pues se gastan alrededor de mil millones de dólares cada año.
Dada la difícil situación económica que padece la República Dominicana, todos los sectores económicos y sociales del país se deben poner de acuerdo para buscar una rápida solución. Recordemos que la presión tributaria en República Dominicana no llega a un 14%, la menor de América. Sin recursos no hay solución.


