Llegó la hora para encontrarnos, una vez más, como pueblo unido, y demostrar este domingo 19 de mayo, nuestra vocación democrática. Iremos a los centros de votación paradepositar el voto por aquellos candidatos y candidatas que merezcan nuestra confianza, manteniendo la esperanza de que nos representarán dignamente. Que sean servidores a quienes les duela de verdad la sociedad, el pueblo y la vida de los pobres, como nos pide el Papa Francisco.
Sabemos que a través de los años hemos visto miembros de los diferentes partidos, desacreditando esta acción tan noble, cuando la convierten en un botín para sus apetencias personales y grupales.
Olvidan lo que expresa el Papa Francisco: “La política, tan denigrada, es una altísima vocación, es una de las formas más preciosas de la caridad, porque busca el bien común”.
Estos pensamientos del Sucesor de Pedro, nos orientan y nos motivan a ir perfeccionando el quehacer político, y cada uno puede aportar desde el espacio donde se encuentra. Avanzaremos cuando los procesos electorales sean diáfanos y transparentes.
Hacemos un llamado a todos los ciudadanos y ciudadanas a ejercer su derecho al voto, siendo fieles a su conciencia. A los delegados de los partidos políticos que estarán en cada mesa, les exhortamos a que este domingo se pongan el traje de la paz y la cordura. Que no se fanaticen, ni sean entes de discordia en la tarea que les ha sido encomendada.
Confiamos en que la Junta Central Electoral cumplirá su misión, para bien del país, y que estará atenta ante cualquier situación anormal que se presente, actuando con probidad y siempre apegada a la ley.
El compromiso de salir bien de este proceso es de todos.
Share
