Editorial periódico Camino
Gracias a la labor incansable de tantos hombres y mujeres que evangelizan con su vida, nuestra Iglesia está creciendo: no sólo en estructuras, sino en comunión, en servicio y testimonio de fe viva.
Así lo han expresado nuestros Obispos al concluir su Asamblea Plenaria número 63, en el Comunicado que han enviado al país, y que ha sido muy comentado por la prensa nacional, debido a los temas sensibles que han abordado. Entre ellos, la situación haitiana.
La inestabilidad política y las dificultades sociales que sufre esa hermana nación ha obligado a muchos de sus ciudadanos a emigrar en busca de un futuro mejor, encontrando en suelo dominicano, un refugio que ofrece cobijo, trabajo y esperanza. Reconocemos el apoyo solidario, el esfuerzo constante que nuestra nación y Gobierno dominicano, se ha ido haciendo y se hace en favor de Haití.
Pero advierten que: Es inaceptable todo discurso, xenófobo y discriminatorio contra el inmigrante, ya que sólo genera sentimientos de odio y violenta, el clima de fraternidad entre nuestras naciones. Rechazamos cualquier discurso que incite a la violencia, el rechazo, la marginación y la discriminación.
Como cristianos, estamos conscientes que en muchas ocasiones, nuestra postura apoyada en el Evangelio no encontrará eco en diversos sectores, yen otros casos, rechazo.Algunos llegan más lejos queriendo descalificar a nuestros pastores, cuando cumpliendo con su deber tocan temas sociales.
Es bueno recordarles a quienes piensan así, que debemos obedecer a Dios antes que a los hombres, porque si no, hasta las piedras hablarían.